viernes, 31 de diciembre de 2010

Laberintos. Una década

En septiembre del año 2000 inició Laberintos, un sitio web sin fin de lucro, dedicado a promover las artes visuales que se desarrollan en México. Fomentar los públicos que se interesen en el arte y la cultura en nuestro país. En especial se pensó en abrir espacios a los artistas emergentes y en aquellos que no habían encontrado un espacio para promover su obra. El principio fue complicado, ya que aún había pocos artistas e instituciones interesados en utilizar el espacio y menos en visitarlo. Pero desde un principio el diseño del sitio se hizo notar y durante dos años resultó premiado como uno de los tres mejores sitios culturales de México mediante el certamen iBest. Los demás participantes fueron instituciones como el CONACULTA, algunos museos, revistas, etc. que pese a tener un presupuesto institucional tenían un diseño del sitio deficiente. En ese momento Laberintos se destacó por su diseño y por su información fresca y oportuna.

Sin embargo al ser una iniciativa particular, "hecha en casa" no permitió que el proyecto creciera a otros niveles. La semilla estaba puesta para que después surgieran otros sitios similares respaldados por una infraestructura y un presupuesto mayor. Artejoven, Arteven, etc.

La experiencia adquirida permitió que surgieran otros proyectos como: www.laberintos.org que mediante la convocatoria internacional "nuevas geografías" generó un espacio que estimuló el uso de internet como soporte de obra (net-art) incluyendo otros proyectos multidisciplinarios que artistas de diversos lugares estaban realizando y que mediante "nuevas geografías" fueron reunidos en un solo lugar. La importante colaboración de Antonio Domínguez fue determinante.

Es difícil reseñar en un espacio como este todas las vivencias generadas desde Laberintos, pero sin duda me enriquecieron como artista visual y como diseñador web. La mayoría de las experiencias han sido positivas, salvo algunas anécdotas negativas que también se dieron en las que pusieron en entredicho la ética de algunas instituciones culturales y de algunos artistas. Pero ese será tema de otra entrada.